El valor de la cercanía, la marca y la bodega en la venta online de vinos

Esta semana, hablando de mayo de 2016 se publicaba un artículo en el que se anunciaba que el gigante de la venta online EBAY se ponía manos a la obra lanzando una tienda de vinos, por supuesto online. Más de 10.000 marcas procedentes de unos 30 países productores. En principio sólo para el mercado americano.

Una iniciativa similar estrenó hace meses, aquí ya en España. AMAZON, otro gigante del comercio online que además de vinos añadía productos no perecederos y como no, destilados.

En venta online hay otras propuestas como los clubs privados de venta o las tiendas físicas que ofrecen “su garantía e imagen” para que aquellos que los visitan puedan disfrutar en su casa de la selección que su personal realiza (sin entrar a valorar los intereses o incluso el conocimiento de cada uno).

Todo esto está muy buen, pero en cierto modo se pierde el encanto del contacto con el bodeguero, ese sentimiento de pertenencia, de cercanía y sobre todo aunque sea una tienda online, haya algo próximo como es una bodega física y que a través de esta podamos comprar para disfrutar del vino, el que ellos mismos elaboran en casa.

En mis viajes con el Wine Up Tour siempre que puedo paso a conocer bodegas y porque no, comprar algunas botellas de vino para mí o para regalar a aquellos que lo merecen.

Visitar la bodega EMINA siempre es un placer, sabes que detrás de esta gran marca hay otra aún mayor como MATARROMERA que no deja de ser aval de los vinos que elaboran. Las compras en bodega están bien, pero ¿si quieres seguir comprando? hay una fácil respuesta que es su propia tienda online EminaShop de Vinos.

Siguiendo con la visita aunque centrándome más en los vinos, he de decir que los conozco todos ya que están puntuados y comentados (por cierto, muy bien) en la guía de vinos Wine Up, que para el que no lo sepa, es de las pocas en el mundo que realiza las catas a ciegas. Con respecto a su extensa gama de productos, no me pregunten cual es mejor, que es una pregunta recurrente pero si lo hacen, mi respuesta es: dame un momento y una compañía y te diré que vino.

A la memoria me vienen los espumosos, para esos días en los que te apetece frescura. En cuanto a blancos, el Gewürztráminer me sorprendió muy gratamente, no es fácil conseguir esa elegancia y finura con un vino blanco. En tintos dependerá de lo que vaya a tomar e incluso algo que tienen pocas bodegas, cuando te apetece un vino pero no puedes tomar alcohol tienen su amplia gama de vinos 0.0.

En definitiva, volviendo a las apuestas digitales de venta, cualquier soporte de calidad será bueno, pero siempre que pueda iré directamente a la tienda online de la bodega. Por un lado, no perdemos el contacto con los productores, con el medio rural que al fin y al cabo es donde encontramos las bodegas. Por otro lado, siempre se habla de que el mejor sitio para conservar un vino es la propia bodega… es decir, que la compra directa en la bodega te permite que el vino llegue en las mejores condiciones, no hay riesgos de mal almacenamiento, temperaturas indeseables en la guarda o transportes o condiciones que al final pueden afectar a la calidad del vino.

La primera compra online que realicé fue hace 15 años, he intervenido e intervengo en proyectos de creación de e-commerce de vinos, he impartido ponencias sobre la utilidad de la tienda online y créanme, lo mejor de la compra digital es tener la garantía de que lo que pide llegará en perfectas condiciones, sin intermediarios, es decir una venta directa en la que la garantía es la de la propia bodega.

No estoy en contra de los clubs de vinos, ni las grandes tiendas online pero hay que saber que en muchos casos lo que compran son lotes desfasados o aun siendo actuales, lo hacen en unas condiciones leoninas para las bodegas obligando en algunos casos a vender casi a coste o bajo costes de producción.

Mi primera opción siempre es comprar en bodega, in situ u online ¿y la tuya?

Joaquín Parra Wine Up!